(sí, la O es la del logo de la escuela al revés porque parece la tapa del WC y la fuente es como los textos que hay en los baños públicos… lol)
El funcionamiento va a ser más simple que la letra de Slow Mo de Chanel para que tampoco puedan existir objeciones de «no soy tecnológico», «¿necesitaré un ordenador?» o «es muy difícil para mí»:
- Desde el 1 hasta el 30 del mes te mandaré un email al día a las 7:07 de la mañana (hora de Madrid, España) con una idea para convertir mejor con tu negocio (o el de tu cliente).
- Los contenidos no te robarán más de 5 minutos.
Algunas ideas serán más aplicables para ti y otras menos. Algunas requerirán de presupuesto y otras las podrás implementar con los céntimos de la cartera. Y algunas serán «normales» y otras tan azarosas que te darán hasta risa.
No es un producto de copywriting, aunque pueda hablar sobre ello, ni encontrarás una guía técnica paso a paso de cómo implementar las ideas. Llevo años sin entrar en el administrador de anuncios y quiero continuar con la racha.
Y si me preguntas por el contenido, si las ideas serán más para un mercado u otro y demás… La respuesta es que sirven para todo. Para ti. Para mí. Para el infoproductor. Para la tienda online. Para el negocio local. Da igual.
Es más, te hago un pequeño spoiler de las ideas que están dentro:
Día 1: cómo convertir tu lista, grupo o lo que tengas en algo más adictivo que Instagram, TikTok y YouTube juntos.
Día 2: una técnica estúpida para convertir una liquidación en un «me lo quitan de las manos». Si tienes una tienda online, esta te gustará más que el papel de doble capa.
Día 3: ¿se pueden convertir los bonus de un programa en el motivo por el que alguien compre y dejar de usar el maldito «valorado en»? Sí, con esta técnica.
Día 4: el único anuncio que jamás dejaré de hacer nunca en mis campañas de venta durante los próximos años. ¿Por qué? Eso te lo cuento dentro.
Día 5: ¿quieres montar un negocio físico y no sabes si deberías hacerlo en un sitio o en otro? Aquí un invitado te explica cómo prevender incluso sin que exista ese negocio.
Día 6: cómo armar un presupuesto que provoca respuestas inmediatas en vez de grillos y mensajes no leídos. Especial para prestadores de servicios.
Día 7: el caballo de Troya en forma de regalo que abre las puertas de clientes sin mandar emails ni comentar en redes. Ah, también ayuda a generar audiencia.
Día 8: un truquito para que veas las palabras intrusión laboral con mejores ojos y conviertas esa situación en una forma de crear estrategias de conversión como si fueras una máquina expendedora.
Día 9: la técnica basada en la famosa frase de Rodrigo Rato de «es el mercado, amigo». Sí, se llama así.
Día 10: cómo ser omnipresente para tu audiencia y usar la publicidad al más puro estilo Coca-Cola o Apple.
Día 11: una forma de mejorar tu oferta sin tener que persuadir más. Es fantástica si tu público es más vago que un nini.
Día 12: el presupuesto que permitió cerrar una (gran) venta a una invitada especial sin hablar (casi) nada de lo que estaba vendiendo. Solo usó una cosita que a todos nos encanta desde el origen de los tiempos.
Día 13: lo que aprendí de los médicos privados para llenar tus sesiones, consultorías o peticiones de servicio todos los meses. Y prontito, en plan en los primeros 5 días.
Día 14: cómo crear un grupo VIP durante un lanzamiento que de verdad sea VIP, te pague la publicidad y encima convierta tanto que pienses en no hacer nada que no sea esto.
Día 15: genera escasez en cualquier evergreen sin tener que usar contadores falsos, historias raras o mentiras con las patas más cortas que el cuello de Fernando Alonso.
Día 16: el secreto (no tan secreto) que ha conseguido que mucha más gente me pague en un plazo que en 3, 6 o 9. Mi caja, mi contable y mi equipo lo agradece mucho.
Día 17: el regalo inesperado. Ese es el nombre de la técnica ultrasecreta para que tus mejores clientes, los que más pagan, los que más han pagado… quieran pagar más, hablen maravillas de ti y sepan que siempre estás ahí para ellos.
Día 18: ¿es posible vender más sin una web, usando una herramienta cutre y encima pareciendo que lo haces de forma personalizada? Se puede con lo que te cuento aquí.
Día 19: cada 3 meses hago una dinámica que me ayuda a saber qué tengo que hacer (y qué no) en el próximo trimestre. Esto se lo robé a Brian Tracy.
Día 20: cómo hablar mal de ti, de tu marca, de tus productos y vender más, recibir más respuestas y una conexión más profunda con tu audiencia.
Día 21: ¿se puede tener autoridad si no eres nadie y tienes menos recorrido profesional que un recién licenciado de la universidad? Así, como nos cuenta la invitada de este día, sí.
Día 22: un email patético, que a veces da hasta risa, y que hace que la gente compre pidiéndote disculpas por no comprar antes. En serio, eso pasa.
Día 23: una de las técnicas preferidas de los email marketers de Estados Unidos para conseguir suscriptores pagando 0,0€.
Día 24: ¿se puede hacer afiliación sin pagar un duro y consiguiendo decenas, cientos o miles de suscriptores a cambio? ¿Y encima cualificados? Claro, con la técnica de Los Reyes Magos.
Día 25: la pregunta que me hago cada vez que tengo dedicar tiempo a crear algo nuevo o poner en marcha una estrategia. De esto habla mucho Robert Kiyosaki.
Día 26: una invitada nos cuenta cómo convertir la fricción, dificultad en el proceso de compra y barreras en un excelente multiplicador de conversión. Vale hasta para ligar.
Día 27: algo mejor que los descuentos para que la gente compre y repita. Ideal si no tienes ni puñetera idea de qué vender después de un lanzamiento.
Día 28: este día respondo todas las dudas que hayan surgido durante el mes. Todas las que tengan sentido, claro.
Día 29: el sistema que estamos implementando en la Escuela Humanista de Álex Rovira para que los alumnos empiecen con buen pie y compren otro programa al acabar.
Día 30: la pinza temporal de la película Tenet aplicada a los negocios. Funciona mejor que la película de Christopher Nolan.
Extra: idea de una invitada más que mezcla a Isabel Allende, Daniel Throssell y una botella de vermú para lanzar.
¿Hay más extras? Puede que sí, puede que no. Me gustan las sorpresas.
Dicho todo esto, solo queda hablar del money y las condiciones: