Mírame.
Soy esa cosita que abres cada día entre 6 y 20 veces, sin importar si es lunes, miércoles o domingo.
También soy el único que no depende de fuentes externas como Facebook™, Instagram™, LinkedIn™, TikTok™ o la red social de moda que surja.
Ya estaba aquí cuando naciste y te acompaño de forma obligatoria a cualquier actividad que quieras hacer en Internet.
Sin mí no tendrías móvil, tablet, ordenador ni actividad online. Nada de nada.
Pero, sobre todo, atraigo a marketers, infoproductores, tiendas online y empresas en general porque…
Soy el campeón mundial de conversión a venta.
Cuando se hace un ranking de “conversión por fuente de tráfico”, siempre gano.
Y con diferencia.
Las redes sociales hacen mucho ruido, generan likes y llenan la barra del ego, pero convierten poco.
La publicidad genera mucho lead, pero sin mí… ¿de qué sirve? La venta directa es una utopía para la mayoría de negocios.
El SEO es fantástico para atraer visitas, pero la conversión se multiplica si añades una secuencia, funnel o algo de email marketing detrás.
Y claro que las llamadas, WhatsApp y compañía convierten muy bien… pero sin una confianza previa (casi) nadie va a darte esos datos.
Todos me han intentado matar una y otra vez…
Pero sigo siendo el principio y final de la estrategia de venta de cualquier negocio que sabe de esto.
Piénsalo…
- ¿Qué pasará cuando las redes sociales dejen de permitir el robo ético de datos a sus usuarios?
- ¿Por qué quieres depender de una fuente externa que te obliga a pagar para llegar a tus propios usuarios?
- ¿Para qué poner todos los huevos en cestas como Facebook™, Instagram™ o TikTok™ si dentro de 5 años puede que ni existan?
Yo no necesito nada de eso porque:
- Solo tengo datos de las personas que han querido dejarlos voluntariamente.
- Llego a todos mis usuarios sin tener que pagar a nadie por ello.
- Seguiré siendo necesario mientras exista Internet o, como mínimo, hasta que nos muramos los que estamos leyendo esto.
Y además consigo ingresos (casi) de inmediato tras un envío y no necesito diseños complicados, programación ni historias raras.
Ya deberías saber quién soy, pero por si acaso me presento:
Me llamo email marketing y hago ganar (mucho) dinero a las personas y empresas que saben usarme.
Lo hago a través de funnels, secuencias automáticas o autoresponders que llegan tras una descarga, registro o regalo.
También en lanzamientos con webinars o Fórmula siendo el responsable de que se consuman los vídeos o directos, se resuelvan las objeciones y lleguen las ventas.
E incluso está de moda usarme de forma diaria para posicionarte como referencia en tu sector y generar ventas por el día, por la noche, everyday.
Soy el mejor amigo de los copywriters (ay, os quiero mucho), tiendas online, infoproductores y sobre todo de un tipo de empresa…
De la que tiene éxito.
Porque el marketing y las ventas van de relaciones y, si alguien confía en darte su email, has dado uno de los pasos más importantes para que esa relación acabe con una transacción económica.
Así que da igual que vendas programas formativos, servicios de coaching, bicicletas, cuchillas de afeitar, miel, guitarras o difusores de aceites esenciales…
Quiero (y debo) ser tu mejor amigo.
Pero…
¿Cómo podemos conseguirlo?
Porque probablemente no tienes ni idea de por dónde empezar o ya has dado algunos pasitos sin saber muy bien qué estás haciendo.
Eso de armar una secuencia, decidir qué emails incluir, pensar un asunto o escribir correos que enganchan a la gente y te hacen recibir felicitaciones (y notificaciones de venta) no es tan fácil… ¿no?
Para solucionarlo voy a dejarte con una persona que ha conseguido esos resultados que tú quieres para él, para sus empresas, para sus clientes y para sus alumnos…
Me llamo Javi Pastor, escribo cientos de emails al año y ahora quiero mostrarte cómo puedes hacerlo tú.
Aún recuerdo mi primera (verdadera) campaña de email marketing.
Consistió en dos tristes emails que lancé para vender un PDF al increíble precio de 10€ (Super About Me).
En el primero avisé de que estaba disponible con un descuento durante unos días y vendí 10.
El segundo lo escribí rápido desde un AirBNB de Lisboa para avisar de que se cerraba el descuento…
Y vendí otros 10.
En ese momento me dije:
“J**** Javi, ¿100€ por email? Es lo más rentable que has hecho en estos años”.
A partir de ahí me obsesionó el email marketing.
Sobre todo porque 100€ por email ahora es ridículo comparado con lo que puedo generar vendiendo mis servicios para crear una secuencia de email o enviando correos a mi lista.
Es más, si hoy me dijeras que tengo que empezar de cero y solo puedo hacer UNA cosa…
Conseguiría suscriptores y enviaría emails. Sin parar.
Por eso creo que es casi obligatorio tener conocimientos de email marketing para triunfar con un negocio online.
Yo me arrepiento de no haber empezado antes y de no darle la importancia que se merece.
Y cada vez que veo una lista sin usar tras un lanzamiento o con un envío al mes…
Me da algo.
Es como vivir encima de una mina de oro y no cavar porque no te apetece, sin más.
Pero yo te voy a mostrar cómo picar esa mina para ti o para otros a través de…