Casi todas las personas que entran en mi mastermind de copywriting llegan con una preocupación común: facturar más.
Al fin y al cabo, ¿quién no quiere recibir más dinero a fin de mes? El problema es cómo conseguirlo.
Para lograrlo, hay dos grandes caminos. El primero es trabajar más. Es decir, buscar más clientes, echar más horas, coger más proyectos, escribir más posts… con lo que eso implica.
El segundo es cobrar más por lo que ya haces. Y esto parece muy fácil… y a la vez es muy difícil.
Salvo que seas un copywriter que acaba de lanzarse al mercado, pocas veces el problema es la falta de trabajo porque hay clientes de sobra.
Casi siempre el motivo que te impide facturar más es cuánto cobras por proyecto. Es muy probable que tus tarifas no sean adecuadas, y si no rectificas terminarás en una espiral de horas de trabajo y clientes tóxicos de la que te puede costar salir.
Hasta que llega el momento de plantarte y decidas de una vez subir tus tarifas de copywriter.
Aumentar las tarifas es tu decisión
Ahora mismo debes estar pensando que he dicho (o escrito) la mayor tontería del mundo.
¿Qué es eso de que subir tarifas es tu decisión?
¿Se le ha ido la pinza a Javi?
Estarás pensando que hay muchos factores que tener en cuenta. Ese cliente regular al que no le puedes subir, la competencia de otros copywriters, tu nivel del experiencia…
Pensarás que esa frase no tiene sentido. Pero créeme que sí lo tiene.
Conozco a muchos copys que han subido tarifas cuando:
- Se han puesto a echar números en casa por algo concreto (un coche, una mudanza, una compra importante…) y las cuentas no salen a medio o largo plazo.
- Han empezado a notar las consecuencias del estrés en su salud, y han visto que no pueden aguantar así mucho más tiempo.
- Han dejado de medir en Toggl las horas de trabajo porque “Total, para qué, si me paso todo el día delante del ordenador”.
Es decir, muchos copys suben sus tarifas cuando están en un punto en el que necesitan hacer cambios en el negocio para ayer.
Y en ese momento de agobio máximo, lo que más miedo da es subir tarifas porque parece que vas a perder clientes y te vas a quedar peor que cómo estabas.
En realidad cobrar más no es tan difícil como parece, siempre que realices un buen trabajo. Las tarifas no están escritas en piedra ni tienes que atarte a ellas como si fuera una hipoteca a 30 años.
Lo normal es que actualices tus tarifas a medida que ganas experiencia, u ofreces servicios más complejos. Y eso es algo que tiene que salir de ti, porque un cliente nunca va a decirte que quiere pagarte más porque el presupuesto que le has pasado le parece barato.
Al contrario, puede que ese cliente encuentre que el presupuesto es muy bajo, te infravalore y prefiera otra opción.
No esperes a quemarte para aumentar tus precios. Si sabes que tienes que hacerlo, toma la decisión ya y aplícala antes de que pase más tiempo.
Nadie va a venir a decirte que quiere pagarte más… Tiene que salir de ti pedir más por tu trabajo.
5 estrategias para subir tus tarifas de copywriting
Una de las mejores señales de que ha llegado el momento de subir tarifas es el número de presupuestos que te aceptan.
Si casi no recibes negativas, o estas se deben a motivos muy claros que no tienen que ver con el precio, entonces es momento de subir. Pero además de cambiar los precios, hay otras cosas que puedes hacer.
#1 Reserva tiempo para tus citas financieras
Las citas financieras son lo menos divertido que te puedes imaginar… pero son muy necesarias cuando eres copywriter freelance. Tener tu cita financiera es como darte un baño de realidad. Ahí es cuando vas a ver cuánto gastas, cuánto ingresas, cuánto te reporta cada cliente y cuánto tiempo le dedicas a cada uno.
O lo que es lo mismo, te vas a dar cuenta de si tus servicios son rentables o no. Si no tienes estos datos, difícilmente vas a poder conseguir mejoras.
#2 Aumenta tu autoridad y marca
Puede que seas un copy buenísimo, pero si no te conoce ni el Tato, no tienes testimonios, no haces networking de ningún tipo y tu perfil de LinkedIn parece el desierto, es difícil que puedas pedir más por tu trabajo.
El nivel de tu marca y el de tus tarifas van de la mano. Cuanta mejor imagen de marca ofrezcas, más podrás pedir. Por eso es buena idea desarrollar un plan de acción con pequeñas acciones que te permitan mejorar tu autoridad.
Tener una web no es imprescindible para empezar. Puedes hacer mucho solo con un perfil de LinkedIn o Instagram optimizado, unas cuantas recomendaciones y un buen modelo de presupuesto. Y mientras no tengas blog puedes publicar en LinkedIn.
Si ya tienes web, una puesta al día nunca le vendrá mal. Muchas veces, unas fotos profesionales son más que suficientes pasar de tener una web regulera a una bien posicionada.
#3 Despide a tus clientes tóxicos
Muchas personas creen que un cliente tóxico es aquel que paga poco. En realidad, esto es relativo. El dinero por sí solo no dice mucho, tienes que ponerlo en relación con el tamaño del proyecto, el tiempo y la energía que te demanda ese cliente.
Yo he tenido clientes para los que he hecho proyectos pequeños y me resultaban rentables, porque era fácil trabajar con ellos, no daban problemas y cumplían los plazos.
En cambio, también hay clientes grandes que queman mucho más. Te piden miles de cambios, te mandan audios de 4 minutos por WhatsApp o cuestionan tu criterio. Al final da igual lo que te paguen, porque acabas harto.
Dejar a ese tipo de clientes asusta y tal vez no puedes hacerlo de un día para otro, pero a medio plazo es positivo. Cuando te quitas de encima clientes tóxicos, despejas tu agenda para otros clientes de más calidad.
#4 Diversifica
Este punto es especial para los copywriters que tienen una gran dependencia de un solo cliente más o menos regular.
Cuando casi todos tus ingresos vienen de una sola fuente, tienes menos capacidad de negociación. Este tipo de clientes te roba mucho tiempo y no te quedan ganas para salir a buscar más.
Pero ese es precisamente el primer paso. Si te pones a buscar y subes de forma progresiva tus tarifas en cada presupuesto, estarás en mejor posición de despedir a ese gran cliente cuando llegue el momento.
#5 Haz subidas progresivas pero constantes
A la hora de subir las tarifas es más prudente ir poco a poco que intentar doblar tus precios de una sola vez.
Salvo que tus precios estén muy desactualizados y tengas una demanda inmensa, no vas a poder hacer una subida muy fuerte de una sola vez.
Aplica una subida progresiva y “toma la temperatura” a tus clientes. La proporción de presupuestos aceptados frente a los rechazados te dirá si puedes seguir subiendo o si debes esperar un poco más.
¿Dónde está el límite? Eso es difícil de decir.
En Estados Unidos las tarifas de copy son muuuucho más altas que en España, y se pagan. El límite lo pone el propio mercado y lo irás descubriendo con la experiencia.
El límite suele estar más en la mentalidad y confianza de cada uno. He oído a muchos copywriters decir “Me da corte pedir X por este trabajo porque me parece mucho”, y luego darse cuenta de que el compañero de al lado está pidiendo eso o más.
Entonces ven que llevan muchos meses cobrando menos de lo que podían haber pedido.
¿Estás pensando en subir precios? Mejor antes que después
Algunos de los pasos que he comentado más arriba pueden necesitar un tiempo. Por eso cuanto antes empieces, mejor.
Cuando mandas un presupuesto con tus nuevos precios da un poco de vértigo, pero en cuanto te aceptan el primero te das cuenta de que esos miedos no tenían sentido.
¿Qué has hecho tú para subir tus tarifas? ¿Has utilizado alguna estrategia diferente?
Creo que no hace falta que lo diga, pero el servicio debe estar a la altura del precio. Si quieres subir tus tarifas de copywriting es importante que te formes para ofrecer un servicio de calidad y, en un futuro, evolucionar a servicios premium. En el entrenamiento gratuito de Adopta un copywriter vas a descubrir cómo lo conseguí yo, y cómo tú puedes lograr también vivir de escribir.
5 comentarios en “Cómo subir tus tarifas de copywriter y ganar más con tu trabajo”
Gracias por este post Javi, se me abre la mente a mayores horizontes. Un saludo.
¡Gracias a ti, Nando!
¡Hola Javi! Muchísimas gracias por este artículo. Hace poquito que empecé a trabajar como copy en Argentina y demanda hay. Muchos me comentan que es la primera vez que encuentran a alguien del país que se dedica a copy y es justo lo que están buscando.
Empecé cobrando poco porque prioricé la experiencia y poco a poco cada vez tengo más demanda. Por eso tenía pensado ir aumentando de a poquito a medida que vaya ganando más experiencia y mis clientes ya empiezan a ver los resultados también. Gracias porque con este articulo reconfirmo lo que planifiqué para que mi marca personal crezca.
Me alegro muchísimo de que el mercado en Argentina se esté animando 🙂 Y de que estés subiendo tarifas de forma gradual, eso es señal de que lo haces bien.
¡Un abrazo!
Hola Laura! Yo también soy de Argentina. Quería aprovechar esta oportunidad de contacto para molestarte con algunas preguntas: cuando pasaste tus primeros presupuestos, ¿cuánto pedías (aprox.) por un trabajo de copy? Estoy en el curso gratuito de Javi y quiero saber si realmente es rentable ser copy, si lo vale para dejar de hacer lo que estoy haciendo actualmente (que mucho dinero no me deja). Soy desempleada y estoy en constante búsqueda de nuevas tendencias y oportunidades de trabajo desde casa (ya que siendo mamá de un niño muy demandante de 2 1/2 años, creo que es lo mejor). Siendo mamá de niños pequeños, se puede trabajar igual de copy? Muchisimas gracias por leerme, saludos!